El Celsius sustituyó en 1948 a la antigua unidad de medida de la temperatura en el sistema internacional
Los grados centígrados desaparecieron hace mucho tiempo, en 1948, como unidad de medida para ser sustituidos por el grado Celsius, que es, junto con el kelvin, la unidad de medida de la temperatura en el Sistema Internacional de Unidades, el que rige en España. Un repaso a lo que ha ocurrido en los últimos siglos con las unidades de medida de la temperatura nos explica por qué es tan frecuente que oigamos o leamos grados centígrados a pesar de que se trata de un error.
A finales del siglo XIX, el Comité Internacional de Pesas y Medidas adoptó, como escala termométrica normal para la Oficina Internacional de Pesas y Medidas (BIPM), la escala centígrada del termómetro de hidrógeno de volumen constante, que tenía como puntos fijos la temperatura del punto del hielo fundente (0 °C) y la del agua destilada en ebullición (100 °C). A partir de ese momento, la unidad de temperatura sería el “grado centígrado” y correspondería a la centésima parte de la diferencia (a presión normal) entre los puntos de fusión del hielo y de ebullición del agua.
Y el grado centígrado continuó siendo utilizado como unidad de temperatura hasta que en 1948 el Comité Consultivo de Termometría discutió acerca de la necesidad de sustituir el punto del hielo, con una reproducibilidad del orden de la milésima de grado, por el punto triple del agua, mejor definido y cuya reproducibilidad era, en aquellos momentos, del orden de la diez-milésima de grado. También se estudió la posibilidad, señalada ya desde 1854 por Lord Kelvin, de definir la temperatura termodinámica mediante un único punto fijo, en lugar de definirla por el intervalo de 0 a 100. Finalmente esta “revolucionaria” idea fue aprobada, después de muchas discusiones, y el punto triple del agua se convirtió en el pilar de la escala de temperatura, al que se le asignó el valor de 0,01 °C (o lo que es lo mismo, 273,16 K). El punto triple es aquel en el que coexisten en equilibrio los tres estados de una sustancia: líquido, sólido y gaseoso y se define con respecto a una temperatura y a una presión. En el caso del agua es, como te decía, 273,16 kelvin y como es un valor constante nos sirve para calibrar los termómetros.
La Conferencia General de Pesas y Medidas de octubre de 1948 aceptó el principio del punto fijo único y decidió sustituir el nombre de “grado centígrado” por “grado Celsius” en honor de Anders Celsius, físico, astrónomo y termometrista sueco que ideó la escala centígrada. El grado Celsius se escribe con el símbolo °C. La búsqueda de un nuevo nombre para la unidad de temperatura se debió a que desde el momento en el que se aceptó el punto triple como referencia y se abandonó el sistema de dos puntos entre 0 y 100, la escala dejó de ser centígrada y mantenerla con ese nombre podía llevar a confusión. Por esa razón desde 1948 los grados centígrados no existen.
En noviembre de 2018 se reunió la 26ª Conferencia General de Pesas y Medidas y en ella se decidió abandonar también el punto triple del agua como referencia. Desde entonces la nueva definición de la unidad de medida de temperatura se basa en un valor numérico exacto de la constante de Boltzmann, por lo que tiene aún menos sentido el término “grado centígrado”, ya que ni siquiera se usa el punto triple del agua en la definición.